Las pensiones son un pilar del denominado Estado del Bienestar y su sostenibilidad es un asunto polémico. A través del Pacto de Toledo se intentó durante años consensuar los principales puntos del sistema. Sin embargo, en los últimos años ha habido problemas derivados de la Crisis Económica de 2008. En este artículo hablaremos del tipo de pensiones que hay y de su futuro a medio plazo. Finalmente, te indicamos cómo una gestoría te puede ayudar.
Los distintos tipos de pensiones
Una pensión está concebida como subsidio para aquellas personas que no pueden trabajar o sostenerse con dignidad. Los casos más recurrentes son las pensiones de jubilación, viudedad y orfandad. También hay subsidios por invalidez.
La pensión de jubilación presupone que una persona ya ha trabajado lo que le correspondía. Hay una exigencia de 15 años de cotización mínima para poder cobrar, aunque se recibiría un porcentaje reducido. Como principio general, la edad de jubilación para las personas para cobrar todo es de 67 años.
Las pensiones de viudedad responden a la necesidad de mantener el nivel de vida de una persona que ha perdido a su cónyuge. La cantidad a cobrar es el 52 % de la base reguladora de la persona fallecida que puede aumentar hasta el 70 % en determinados casos. Esta percepción se cobrará indefinidamente siempre que no se vuelva a contraer matrimonio.
La pensión de orfandad es una opción para las personas menores de edad y jóvenes que han perdido a uno de sus progenitores. Con carácter general, se cobra el 20 % de la base reguladora hasta los 21 años. En el caso de las personas con diversidad funcional u orfandad absoluta, cambiarán las circunstancias.
En los casos de invalidez, dependerá de la situación. No se consideran pensiones contributivas, en tanto en cuanto no es necesario haber cotizado antes a la Seguridad Social. Eso sí, hay que pasar por un tribunal médico que indique, efectivamente, que la persona no se puede valer por sí misma.
La sostenibilidad del sistema de pensiones
La sostenibilidad del sistema de pensiones está por el momento comprometida. No en vano, el debate ha estado en aumentar un mínimo las pensiones cada año. La actual legislación obliga tan solo a un aumento del 0,25 % anual. Al final, la revalorización va a depender de lo que decida cada año el Gobierno a través del proyecto de Presupuestos Generales del Estado.
Otro de los problemas recurrentes está en la pérdida de fondo de ahorro para pagar las prestaciones públicas. Por lo tanto, plantearse la contratación de un plan de pensiones privado es una opción de futuro. No en vano, hay que tener en cuenta que la sostenibilidad del sistema está comprometida a medio-largo plazo.
Conclusión
En una Gestoría Fiscal Contable te podemos asesorar para que sepas cuánto va a cobrar por pensión o lo que necesitas para aumentar tu percepción. Por este motivo, te animamos a que nos contactes si buscas profesionales que te puedan ayudar. Además, nos encargamos de enviar en tu nombre los documentos a la Administración. Estamos a tu disposición para representarte, seas particular o profesional.
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